Sin nombre
No contaba con las partes
Anheladas y sentidas,
recubiertas de olvidos irónicos
de farsas y camuflajes
de encerados brillos y
cercenados recuerdos
hoy recuperadas de no haber sido nunca
tan inéditas, tan torpes, tan miopes de la luz que enceguece
de cara al infernal cielo diurno,
abrazadas y destapadas en su feroz convalecencia.
Como contarlas.
Una y
Una y
Una y una más. O no.
Una y una menos, quizás,
despejada y errante.
Antes del primer bostezo.
La noche las enhebrará paciente y
las llamará por un nombre
¿Existe lo que no tiene nombre?
ResponderBorrar¿Cómo existe lo nombrado, en el permanente cambio? Conserva su sentido o es otro?
Imposible sustraerse a las iluminaciones que el psicoanálisis ha ido incorporando, la filosofía y otras disciplinas,imposible ignorar los entrecruzamientos, los dominios del sentido, la primacía de unos conceptos sobre otros..Hasta qué punto nuestras elecciones en el campo del gusto y las formas en la poesía. están sobredeterminadas?.
No salir del campo de la experimentacióny el interrogante, en los andariveles del lenguaje?
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Mientras me digo esto, recuerdo una taza azul.
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